Narcotráfico, homicidios y articulación interagencial, en la agenda del Consejo Extraordinario de Seguridad
En medio de un panorama marcado por el aumento de los homicidios y la incidencia del narcotráfico en la capital, el Gobierno Nacional anunció la asignación de 1.500 nuevos policías para fortalecer la seguridad en Bogotá durante los próximos ocho meses.
El anuncio fue hecho tras un consejo extraordinario de seguridad realizado en el Palacio de Liévano, encabezado por el ministro de Defensa, Pedro Arnulfo Sánchez Suárez, y el alcalde mayor de Bogotá, Carlos Fernando Galán.
Refuerzo progresivo del pie de fuerza
De acuerdo con lo informado, 800 uniformados llegarán a la ciudad antes de finalizar el 2025, mientras que otros 700 se sumarán en mayo de 2026, con el objetivo de fortalecer la operatividad de la Policía Metropolitana de Bogotá, que en los últimos años ha sufrido una disminución de su personal activo.
“El pie de fuerza ha estado mermado, y este refuerzo nos permitirá atender de manera más eficaz los retos de seguridad de una ciudad como Bogotá”, afirmó Galán.
El general Carlos Fernando Triana, director de la Policía Nacional, detalló que las Direcciones centrales de la institución apoyarán de forma estratégica la seguridad en distintas localidades, con despliegues en tres franjas críticas: la mañana, el mediodía y la noche. El propósito es aumentar la eficacia de los cuadrantes y garantizar una presencia disuasiva y reactiva en las calles.
Narcotráfico y homicidios en la agenda de seguridad
Uno de los puntos centrales del consejo fue el impacto del narcotráfico en la capital, donde este año se han capturado 20 narcotraficantes de 11 nacionalidades diferentes, siete de ellos en Bogotá.
El ministro Sánchez advirtió que si bien no hay evidencia de control territorial por parte de bandas criminales en la ciudad, sí existe una fuerte injerencia de redes internacionales de narcotráfico en la economía ilícita y en actividades comerciales.
“La llamada Nueva Junta del Narcotráfico no es una organización jerárquica, sino una convergencia de distintos actores criminales que operan en red, respondiendo a intereses particulares más que a una estructura unificada”, explicó el jefe de la cartera de Defensa.
El informe de inteligencia sobre este fenómeno será entregado en los próximos días por la Dirección Nacional de Inteligencia (DNI) al alcalde Galán, para trazar nuevas líneas de acción.
Las autoridades también confirmaron que al menos 15 homicidios registrados en los últimos seis años en la capital estarían directamente vinculados a ajustes de cuentas por narcotráfico, lo que refuerza la hipótesis de que Bogotá funciona como un punto estratégico para estas organizaciones.
Cooperación internacional e interinstitucional
El Gobierno Nacional informó que se han activado mecanismos de coordinación interagencial con cuerpos de seguridad de América y Europa, con el fin de identificar e individualizar a los miembros de estas redes criminales que tienen incidencia en Bogotá.
Este trabajo conjunto busca anticipar movimientos de organizaciones transnacionales y evitar que los capitalinos sigan expuestos a los efectos de las disputas criminales.
Un desafío compartido
La llegada de los 1.500 uniformados se suma a las estrategias locales que la Alcaldía ha implementado en temas de vigilancia, control y convivencia ciudadana. El alcalde Galán destacó que el esfuerzo conjunto con el Ejecutivo es clave para romper la tendencia al alza de los homicidios y recuperar la confianza ciudadana.
Por su parte, el ministro Sánchez concluyó:
“Bogotá enfrenta un reto complejo en materia de seguridad, pero con el fortalecimiento del pie de fuerza, la articulación institucional y el respaldo internacional, avanzaremos en la desarticulación de redes criminales que afectan la tranquilidad de los ciudadanos”.