En el sur del departamento del Chocó, un paro armado del ELN, produce en sus habitantes, nueva tensión al cese bilateral del fuego con el Gobierno Nacional ya que viene acumulando quejas y dudas de ambas partes

Es de recordar que según la Defensoría, el pasado 14 de agosto se reactivaron los enfrentamientos entre el ELN y el Clan del Golfo, en su lucha por consolidar un corredor estratégico.

En un comunicado, el Frente de Guerra Occidental del ELN reportó que mató a cuatro de sus enemigos, entre ellos a un cabecilla apodado “Trili” o “W”, y dejó a otros cuatro heridos en el sector de Caño Cocoperro.

A raíz de dicho combate, el grupo insurgente suspendió “el tránsito de cualquier medio de transporte durante 24 horas en todo el río San Juan y sus afluentes, desde las 00:00 horas del 16 de agosto hasta las 00:00 del 17 de agosto”, se lee en el cartel.

Según el Frente de Guerra Occidental, hay “un contubernio entre paramilitares del Clan del Golfo, disidencias de las Farc y las Fuerzas Militares en Chocó y Valle. Es inocultable el apoyo que les brindan en terreno a estos mercenarios”.https://d-32576188512089026006.ampproject.net/2307272333000/frame.html

En un video publicado este jueves, el jefe negociador del ELN, “Pablo Beltrán”, se quejó porque, a su juicio, hay “una doble ofensiva contra la mesa de paz (…). En los territorios una serie de grupos iniciaron acciones ofensivas contra las fuerzas del Gobierno y las del ELN. ¿Qué buscan? ¿Dañar el cese? ¿Inestabilizar al Gobierno? Y el otro proceso, que se desarrolla en paralelo, es una ofensiva mediática”.

Añadió que en ciertas regiones hay “connivencia, cosas que el Ejército no puede hacer porque la ley se los prohibe, se las encomiendan a esos grupos”, como el Clan del Golfo, y citó un ataque en Nariño, en el que hubo insurgentes muertos.

De parte del Estado también hay reclamos al comportamiento del ELN. El fiscal Francisco Barbosa denunció que había un plan para asesinarlo a él, al excomandante del Ejército, general (r) Eduardo Zapateiro, y a la senadora opositora María F. Cabal.

El comandante de las FF.MM., general Helder Giraldo, reconoció el 7 de agosto que sus hombres investigaban seis casos de posibles violaciones a la tregua de parte de los rebeldes.