Cuando parecía que Junior de Barranquilla tenía todo listo para anunciar a Luis Ángel Díaz como nuevo refuerzo, apareció un nuevo competidor que cambió el rumbo de la historia: Necaxa de México.
El equipo azteca entró con fuerza en la negociación y le presentó una oferta directa al Envigado FC, club que posee los derechos del extremo. La propuesta mexicana dejó en pausa un acuerdo que, según se manejaba, estaba en un 95% cerrado entre Junior y los hermanos Luis y Alejandro Valero, líderes del grupo inversor que administra al conjunto antioqueño.
Con la oferta del Necaxa sobre la mesa, la llegada de Díaz al conjunto barranquillero quedó en entredicho. El futbolista ahora tiene más de una opción y el factor económico podría inclinar la balanza hacia el exterior.
En medio del giro inesperado, Envigado también descartó cualquier posibilidad con Newell’s Old Boys de Argentina, debido a un conflicto anterior relacionado con el traspaso del defensor Carlos Ordóñez.
Así las cosas, mientras Junior ve cómo se complica un fichaje que daba por hecho, Necaxa gana terreno y busca arrebatarle al club colombiano una de sus grandes apuestas para este semestre.