Llegó la noche del viernes 9 de junio y luego de caer el día se dio la escabrosa noticia de la extraña muerte del coronel de la policía, Oscar Dávila.
Según manifiestan, el uniformado apareció sin vida en extrañas circunstancias Dávila, quien laboraba en Presidencia como jefe de seguridad anticipativa de la jefatura de seguridad presidencial.
Es de recordar que Dávila había dado en días pasados, explicaciones por el caso del polígrafo y chuzadas a la exniñera de Laura Sarabia.
Es importante comunicar que el coronel había escrito una misiva fechada el pasado 2 de junio, en la que el coronel solicitaba a la Fiscalía ser escuchado acerca del escándalo que afectó a la exjefe de Gabinete.
En el documento, el coronel se presenta como coordinador de Protección Anticipativa de la Jefatura de Protección Presidencial y se pone a completa disposición para contribuir al esclarecimiento de los acontecimientos que son puntos vitales de investigación.
En mi calidad de servidor público, en el cargo de teniente coronel -Coordinador de Protección Anticipativa de la Presidencia de la República, informo a usted mi absoluta disponibilidad para presentarme ante el despacho del ente investigador que se me indique, a fin de rendir entrevista con ocasión de los hechos de público conocimiento socializados en los últimos días a través de los medios de comunicación y que involucraron a altos funcionarios de la Presidencia de la República”.
No obstante, añadió a qué se debía su carta: “Todo lo anterior, tiene su génesis en las denuncias y publicaciones presentadas que tratan sobre el caso de la jefe del despacho Presidencial Laura Sarabia, en los que presuntamente vinculan a la Jefatura”.
Al final de la carta deja sus datos de contacto para ser ubicado ante cualquier requerimiento, la misma dirección en la que fue encontrado sin signos vitales por investigadores del CTI de la Fiscalía.
Sobre el caso que aún se encuentra en estudio, un testigo informó que vio al coronel desesperado ir hasta su auto y enseguida escuchó el disparo con el que el oficial se habría quitado la vida.
Es de informar que Dávila le habría comunicado algunas personas que se sentía muy presionado por la entidad.
Lo anterior lo confirmó el abogado Miguel Ángel del Río en las últimas horas, después de conocerse el hecho.
”El día de ayer me reuní con el coronel Dávila, quien me buscó para manifestarme que de la Fiscalía lo estaban amenazando. Le advirtieron que no se detendrían “hasta que corriera sangre”. Hoy se quitó la vida con su arma de dotación. Lo de la Fiscalía es una persecución infame”, aseguró Del Río.
De igual forma el presidente Gustavo Petro no siendo ajeno al suceso explicó que estaría acompañado de su escolta:
“cerca a su casa mandó a su conductor por una botella de agua, este dejó su pistola en el asiento y cuando regresó, delante de él se suicidó con un disparo en la cien con la pistola que había dejado”.
El mandatario también aseguró que “no hay más disparos en el lugar. No es cierto que el coronel haya sido encontrado muerto ni que haya dos disparos en su cuerpo”.
Petro, además, comentó que Dávila previamente “había recibido varias llamadas de la prensa y había asistido a la diligencia del CTI en el piso 13 de la DIAN”.