En un encuentro celebrado este lunes en las instalaciones del Ministerio del Interior, el jefe de la cartera, Armando Benedetti, se reunió con más de 30 líderes interreligiosos para ratificar el compromiso del Gobierno Nacional con la libertad religiosa y de culto en Colombia.
«Ha quedado claro que la fe no es una concesión estatal, es un derecho fundamental», afirmó Benedetti durante su intervención. El ministro fue enfático en que el Estado no tiene como función regular en exceso las prácticas religiosas ni imponer límites arbitrarios a las expresiones de fe.
La reunión tuvo como propósito escuchar a representantes de distintas comunidades religiosas y garantizar que sus derechos se mantengan intactos, sin imposiciones ni obstáculos administrativos. «Nos corresponde garantizar que toda persona pueda ejercer su fe sin coacción, sin obstáculos, sin miedo», añadió el funcionario.
Benedetti también desmintió categóricamente los rumores sobre supuestos nuevos impuestos o requisitos para ejercer el culto religioso. “Nadie tendrá que pagar más impuestos ni enfrentar más requisitos por sostener un culto. No se cobrará por orar, ni se pondrán trabas técnicas a quienes quieran bendecir, reunir o consolar”, declaró.
Declaración completa:
El encuentro fue bien recibido por los líderes religiosos presentes, quienes valoraron el espacio de diálogo y reiteraron la importancia de seguir trabajando conjuntamente por un país que respete la diversidad espiritual y garantice la libertad de conciencia.
Esta declaración ocurre en medio de inquietudes surgidas en algunos sectores sobre posibles regulaciones o restricciones al ejercicio de las creencias religiosas. La aclaración del ministro busca disipar temores y reforzar el principio constitucional de libertad religiosa consagrado en Colombia desde la Ley 133 de 1994.