La ofensiva policial desplegada en distintos puntos de la ciudad y su área metropolitana dejó un balance contundente: 45 personas capturadas, armas de fuego incautadas, motocicletas y vehículos recuperados, además de cientos de comparendos de tránsito.
Los operativos, liderados por el brigadier general Edwin Masleider Urrego Pedraza, comandante de la Policía Metropolitana de Barranquilla, se enfocaron en los barrios más golpeados por la criminalidad, entre ellos Rebolo, La Chinita, Las Gardenias y varios sectores de Soledad, donde los uniformados realizaron tomas masivas para contener el accionar de las estructuras delictivas.
Detalles de las capturas
De los 45 capturados, 33 fueron sorprendidos en flagrancia y 12 tenían orden judicial vigente. Entre los delitos más frecuentes se registraron hurto, porte ilegal de armas, tráfico de estupefacientes y violencia intrafamiliar.
En medio de los procedimientos fueron decomisadas siete armas de fuego, además de la recuperación de cuatro motocicletas y un vehículo que figuraban como robados.
Los uniformados contaron con el respaldo de todas las especialidades de la institución: Grupos de Investigación Criminal, GOES, Gaula, Inteligencia, Tránsito, Infancia y Adolescencia, y Protección. Drones y personal especializado reforzaron las operaciones en zonas críticas, donde la Policía busca devolver la tranquilidad a los vecinos.
En paralelo, la Seccional de Tránsito y Transporte instaló seis puestos de control que permitieron la inmovilización de 14 vehículos y 95 motocicletas. También se impusieron 528 comparendos por diferentes infracciones y se practicaron más de 10 pruebas de embriaguez.
«Una ofensiva que no se detendrá«
El general Urrego Pedraza aseguró que esta estrategia es parte de un plan sostenido contra la delincuencia.
“No vamos a permitir que las estructuras criminales sigan sembrando miedo. Estas operaciones continuarán durante todo el fin de semana y los próximos días”, enfatizó el oficial.
Con estos resultados, la Policía Metropolitana busca enviar un mensaje claro: las calles de Barranquilla y Soledad están bajo control de la autoridad y no de la delincuencia.