En el Centro Nacional de Atención en Frontera (CENAF) se llevó a cabo una mesa de trabajo entre familiares de colombianos detenidos en Venezuela, el Viceministerio de Asuntos Multilaterales de la Cancillería y delegados de la Defensoría del Pueblo. El encuentro tuvo como propósito revisar la situación humanitaria de los connacionales privados de la libertad en ese país y consolidar un canal de diálogo permanente entre las familias y el Estado colombiano.

Durante la reunión, los familiares expusieron nuevamente sus preocupaciones por las condiciones de detención de sus seres queridos. Señalaron que en muchos casos llevan meses o incluso años sin recibir información sobre su paradero o estado de salud. También expresaron inquietud por presuntos episodios de intimidación, deterioro físico y emocional, falta de acceso a artículos básicos y, en algunos testimonios, denuncias de tratos crueles o torturas.

En el espacio de diálogo, las familias reiteraron su petición para que la Cancillería intensifique las gestiones diplomáticas con el gobierno venezolano, con el fin de obtener información actualizada sobre los detenidos, garantizar estándares mínimos de trato digno y avanzar, en los casos que corresponda, hacia su liberación. Estos planteamientos fueron consolidados en un documento que sintetiza los requerimientos humanitarios y de derechos fundamentales que los familiares consideran urgentes.

El Viceministro de Asuntos Multilaterales se comprometió a entregar este documento a las autoridades venezolanas y a fortalecer las acciones que la Cancillería adelanta para asegurar la titularidad de derechos de los colombianos privados de la libertad. Asimismo, reiteró la importancia de mantener un canal abierto y permanente con los familiares para informar sobre avances y gestiones en curso.

Tanto los representantes del Gobierno como los familiares coincidieron en la necesidad de mantener estas mesas de trabajo como mecanismo para monitorear la situación humanitaria en los centros de reclusión venezolanos y para acompañar a las familias que siguen a la espera de respuestas.

La declaración conjunta quedó registrada al cierre del encuentro, firmado este 20 de noviembre en Villa del Rosario, Norte de Santander.