Con un acto solemne desde la histórica ciudad de Santa Marta, el presidente Gustavo Petro lideró este sábado 20 de julio los actos conmemorativos del aniversario 215 del Grito de Independencia de Colombia. La ceremonia, cargada de simbolismo histórico y visión política, tuvo lugar antes del tradicional desfile militar y contó con la presencia de miembros del gabinete, altos mandos de las Fuerzas Armadas, autoridades civiles y ciudadanos.

En su intervención, el mandatario propuso revivir el sueño de una Gran Colombia unida, libre y solidaria, e hizo un llamado a los pueblos latinoamericanos a caminar hacia un proyecto común de justicia social y dignidad humana. “Es posible, a pesar de las diferencias, construir una nación grande, una nueva Gran Colombia libre, un país del tamaño de nuestros sueños”, expresó el presidente ante los asistentes.

Desde Santa Marta, ciudad en la que murió el Libertador Simón Bolívar y símbolo del legado emancipador, Petro apeló a la memoria histórica del Caribe colombiano para plantear un horizonte de transformación social. “Santa Marta y su ciénaga, con sus cinco siglos de soledad, deben convertirse en el corazón del mundo y punto de partida para una civilización centrada en la libertad y la superación de todas las formas de esclavitud”, afirmó.

Desde Santa Marta, símbolo de libertad, presidente Petro convoca a los ciudadanos a reconstruir una Gran Colombia libre y unida

El presidente también evocó imágenes poderosas al invitar a la juventud a reconectarse con el mar como símbolo de libertad, conocimiento y restitución. “Volveremos a mirar el mar, volveremos a surcarlo para hacer transformaciones. Del mundo volverán nuestros jóvenes… a sacar un gran tesoro de la humanidad: su propia libertad.”

Además, Petro recordó la historia de la resistencia afrodescendiente, mencionando la resignificación del antiguo Palacio de la Inquisición en Cartagena, que hoy lleva el nombre de Benkos Biohó, líder cimarrón símbolo de la lucha por la libertad. “Donde estuvieron las cadenas, que ahora sea un triste recuerdo de una humanidad que no debió ser”, subrayó.

El acto central en Santa Marta culminó con un desfile militar en honor a los próceres de la independencia, mientras en diferentes ciudades del país también se llevaron a cabo actos cívicos y culturales, incluyendo izadas de bandera, conciertos, y actividades educativas.

La jornada del 20 de julio no solo fue un homenaje a la historia, sino también un espacio para reflexionar sobre el presente y el futuro de Colombia en un contexto regional más amplio. Como concluyó el presidente Petro: “Que Santa Marta, y Colombia, y la vieja Gran Colombia, sean el corazón de la libertad del planeta.”