Capturan en Cundinamarca al hermano de ‘Iván Mordisco’, pieza clave en la logística de las disidencias

El operativo sorprendió por realizarse en una zona alejada del dominio habitual de ese grupo armado

El operativo se desarrolló con precisión. Hombres de inteligencia llegaron de manera encubierta, aseguraron el perímetro y, sin disparar un solo tiro, lograron la captura del señalado, quien llevaba más de 11 años vinculado a la estructura criminal y que, según las autoridades, era uno de los pilares financieros y logísticos de su hermano.

La detención de Vera Fernández revela cómo las estructuras ilegales expanden sus tentáculos logísticos más allá de las zonas de conflicto

La deligencia judicial se realizó en conjunto de la Policía Nacional y la Fiscalía General de la Nación, en el municipio de El Peñón (Cundinamarca). Alias “Mono Luis”, es señalado de ser hermano y uno de los principales operadores de confianza de alias “Iván Mordisco”, jefe del Estado Mayor Central de las disidencias de las Farc.

El presidente Gustavo Petro confirmó la captura y la calificó como un golpe significativo contra las finanzas y la logística de esa organización ilegal, que en los últimos meses ha intensificado su accionar violento en varias regiones del país.

“El hermano de Iván Mordisco fue capturado en Cundinamarca. Seguiremos debilitando las estructuras que financian la violencia en el país”, escribió el mandatario en sus redes sociales.

Un hombre clave en la sombra

De acuerdo con información de inteligencia, Fernández llevaba más de una década vinculado a la estructura criminal. Aunque no figuraba en combates ni mandos visibles, habría desempeñado un papel estratégico: el manejo de recursos, coordinación de rutas del narcotráfico y canalización de dineros para sostener frentes armados en departamentos como Caquetá, Meta, Guaviare y Putumayo.

Las autoridades consideran que este rol en la “retaguardia financiera” lo convertía en un eslabón esencial dentro del engranaje de Mordisco, quien desde la firma del Acuerdo de Paz en 2016 se consolidó como el principal líder de las disidencias que no se acogieron al proceso.

El hallazgo refuerza la hipótesis de que las disidencias están buscando diversificar sus puntos de apoyo en el centro del país, lo que representa un reto mayor para la seguridad nacional.

Aunque la detención de Fernández no implica un golpe directo al mando militar de la estructura, sí afecta la línea de confianza más cercana a Mordisco. Para los analistas en seguridad, este tipo de capturas golpean la moral de la organización y generan fisuras internas, aunque difícilmente la desarticulan de manera inmediata.

El Gobierno, por su parte, insiste en que esta operación se enmarca dentro de la estrategia de contención a la expansión de las economías ilegales, consideradas el combustible de las acciones armadas que han dejado en las últimas semanas decenas de víctimas entre civiles y miembros de la Fuerza Pública.

Alias “Mono Luis” quedó a disposición de la Fiscalía, que lo presentará ante un juez de control de garantías para imputarle cargos por concierto para delinquir, narcotráfico y financiación de grupos armados ilegales.

De ser hallado responsable, enfrentaría una pena significativa que lo apartaría de la estructura, aunque las autoridades reconocen que el andamiaje criminal del Estado Mayor Central sigue intacto y con capacidad de reposición de cuadros.

Una captura confirmada desde el Palacio de Nariño

Un papel silencioso pero estratégico

Alias “Mono Luis” no era un combatiente visible ni un jefe de frente, pero su rol era fundamental: manejar las redes de narcotráfico, mover dinero y garantizar el abastecimiento de los grupos armados. Su captura, más allá de lo simbólico por tratarse del hermano de Mordisco, afecta un punto sensible de la organización: sus finanzas.

Analistas señalan que la ubicación de Fernández en Cundinamarca confirma que las disidencias han buscado extender sus tentáculos más allá de los corredores tradicionales del suroriente del país, explorando zonas más centrales para diversificar rutas y operaciones de lavado de activos.

El impacto en la estructura

Aunque el golpe no supone el desmonte de la organización, sí representa un duro revés en la línea más íntima del jefe disidente, quien en los últimos meses ha intensificado su accionar armado en departamentos como Cauca, Nariño, Caquetá y Meta.

“Las estructuras ilegales se sostienen gracias a quienes mueven la plata y los contactos. Al quitarles esas piezas, aunque las puedan reemplazar, se generan fracturas internas”, explicó un oficial de inteligencia consultado tras el operativo.

Vera Fernández fue puesto a disposición de la Fiscalía, que lo presentará ante un juez de control de garantías. Los delitos que le atribuyen incluyen concierto para delinquir agravado, narcotráfico y financiación de grupos armados ilegales.

Mientras avanza el proceso judicial, el Gobierno insiste en que la captura es un paso más dentro de la estrategia para frenar la violencia y debilitar las economías ilegales que alimentan el conflicto. Sin embargo, las comunidades en terreno saben que el camino será largo: la estructura de Mordisco sigue operando con fuerza en varias regiones del país.