La actriz Emma Watson, recordada por millones como Hermione en Harry Potter, enfrenta una ola de cuestionamientos tras conocerse que las autoridades británicas le suspendieron la licencia de conducir por seis meses debido a reiteradas infracciones de tránsito.

La decisión fue tomada luego de que Watson acumuló varias multas por exceso de velocidad y no atendiera debidamente las notificaciones oficiales. El caso no solo derivó en la suspensión de su permiso de conducción, sino también en una multa económica.

Más allá de la sanción legal, el episodio ha desatado críticas por parte del público, que cuestiona la falta de responsabilidad de la actriz, especialmente al tratarse de una figura admirada por jóvenes en todo el mundo. “Este tipo de comportamiento manda un mensaje equivocado. La ley debe ser igual para todos, pero también se espera más de quienes tienen tanta visibilidad”, expresó un analista de medios británico.

Emma Watson no ha ofrecido declaraciones al respecto, lo que ha sido interpretado por algunos como falta de autocrítica ante un hecho que pudo haber tenido consecuencias más graves.

El incidente pone en tela de juicio el comportamiento de celebridades fuera del escenario público y reaviva el debate sobre el ejemplo que deben dar quienes gozan de reconocimiento internacional.