En Suárez, Cauca los habitantes llevan 3 días escondidos n una iglesia cristiana. Hasta allí llegaron después de que las disidencias lanzaron un ataque contra una guarnición militar en la madrugada del lunes.
En la iglesia la comunidad adecuó una cocina y colchonetas. Los niños reciben clases a través de talleres a distancia porque la escuela cerró y los ancianos pasan el día en los corredores del centro religioso.
Hasta el lugar ha llegado ayuda humanitaria y la comunidad insiste en que se haga un barrido a la zona para descartar que ningún explosivo sin detonar quedara en medio del camino a sus hogares.
Ángela Carrasco, directora de la Unidad de Víctimas del Cauca, señaló que la comunidad y el Ejército acordaron recorrer la zona para verificar que cerca a sus viviendas no quedaran restos de explosivos y añadió, en diálogo con este diario, que los desplazados están refugiados en la iglesia y en viviendas vecinas que les han brindado posada.
La situación de orden público en el Cauca es tensa desde la madrugada de este lunes, cuando los disidentes decidieron atacar, en simultánea, una estación de Policía en Morales –que dejó cuatro muertos– y la guarnición militar en Suárez. El Ejército aseguró una ofensiva total contra los ilegales en el suroccidente del país.
De hecho, el presidente Gustavo Petro viajó hasta el Cauca para estar al frente de la situación de orden público. Las Fuerzas Militares también enviaron 200 uniformados de las Fuerzas Especiales para reforzar la seguridad.