Comprometidos con la protección de los pueblos indígenas, el Ejército Nacional y la Alcaldía de Carurú, lograron que un joven, quien presuntamente habría sido reclutado por un grupo armado ilegal, en Vaupés, hace dos años se reencontrara con su padre.

Según versiones del padre del joven, en el año 2020, integrantes de un grupo armado ilegal llegaron hasta su comunidad indígena, ubicada a 16 horas del casco urbano de Mitú, y prometieron a los jóvenes una oportunidad de empleo con excelente remuneración, en otro departamento. Mediante este engaño fue sacado de su lugar de origen y presuntamente reclutado para adelantar actividades ilegales.


El Ejército Nacional como columna central que sostiene la construcción de una nación en paz, lucha contra el reclutamiento forzado de niños, niñas y adolescentes, y en pro de la seguridad y la vida de las comunidades indígenas, orienta sus esfuerzos en campañas de prevención contra este delito que acecha a las familias colombianas.
Es por eso que gracias a la red de participación cívica, se logró ubicar y contactar al joven y su familia para propiciar el anhelado reencuentro.

Desde el departamento del Guaviare, el joven abordó un vuelo que en una hora y 10 minutos lo trajo al lugar que lo vio nacer, donde lo esperaba su cultura, sus costumbres y tradiciones. Simultáneamente el padre quien habita a más de 30 minutos del casco urbano de Mitú, en la espesa selva, también emprendía su viaje para de nuevo estar frente a frente con su hijo.

El joven fue recibido en el aeropuerto Fabio Alberto León Bentley de Mitú, por una comitiva del Ejército compuesta por profesionales en salud quienes verificaron su estado y por un orientador que le indicaba el proceso de reintegración a la vida civil y los beneficios que trae consigo luego de pasar en calidad de sometido a la justicia.

El emotivo reencuentro con su padre, estuvo acompañado de un sentido abrazo y una larga conversación en cubeo, lengua nativa de la comunidad indígena. Allí explicó cómo terminó mendigando en las calles de San José del Guaviare. Las autoridades establecen cuál fue su método de escape.

El sometido continuará su proceso jurídico respectivo y accederá a los beneficios que la ley dispone para estos casos. Por su parte, los soldados del Ejército Nacional continuarán trabajando por una Colombia que sea reconocida como potencia mundial de la vida, protegiendo los derechos de las comunidades indígenas del Vaupés, particularmente.